Inversión en Publicidad Online. El reto actual de las valoraciones y la contabilidad.

Capitalizar, nos una palabra común, pero en las empresas, es ciertamente importante. Se habla de capitalizar, cuando hablas de una inversión, que es un activo, como, por ejemplo, un coche, una nave, una tienda, o incluso, el desarrollo de una herramienta tecnológica.

Siempre hablamos de las personas como activos importantes. Puesto que, en muchos casos, son capitalizables, se amortizan, contablemente hablando también.

¿Y un cliente? Es un activo. Quizás, el mejor activo. ¿Cuánto vale una empresa? Por sus empleados, su tienda, su nave, sus coches, y sus clientes, ¿correcto? Y porqué no capitalizar la inversión que hacemos en nuestros clientes, si ya, hablamos siempre de inversión.

El problema contablemente radica en que la norma, establece claramente que, tiene que ser controlable, y hay que demostrar que existe un beneficio futuro.

Un cliente, es controlable, a nivel de gestión inteligente y datos. A través de un CRM por ejemplo. Saber cuanto invertimos en un cliente, y cuanto nos genera el cliente, es viable. Y con el estudio realizado, aún más. Con la IA, ya pasamos a otro nivel.

¿Para qué todo esto? Porque no que no es lo mismo una empresa que tenga 3M€ en Gasto (pérdidas por pagos a proveedores como Google ADS, Facebook ADS, etc), que en el Activo. Vale más, lógicamente. (no caigamos en la tentación de pensar que son 6M€, porque a nivel contable, no funciona así).

A partir de ahí, si, fiscalmente, el gobierno obtiene más impuestos, y la empresa sale perjudicada, pero, entonces, ¿por qué no aplicar un IMV (Informe motivado vinculante) como se hace con el I+D para las deducciones fiscales? Sencillo.

Pues esto mismo, es lo que resulta del estudio realizado y presentado en el CIO Congress del 2023 en Barcelona. Importante, porque sentamos las bases de lo “digital” como activo invertible y amortizable (Como me decían). Necesario, porque según la literatura y bibliografía, llevamos muchos años con este punto, y todavía no se han llevado los cambios necesarios. Ni en España (no resulta raro, llevamos desde el 2007 con parches), ni en las normas internacionales como la IFRS38. Es necesario, sin más. Además, porque una inversión así tiene un periodo de amortización a determinar en un cliente. Y esto, hace que genere un modelo totalmente de mejora para las empresas desde el punto de vista de la contabilidad, pero sobre todo para las valoraciones intangible existentes en la actualidad. Y esto, si que es un reto. Porque si adicionalmente, relacionamos esta inversión con la deuda, existe una correlación intrínseca con la valoración de la empresa, que veremos el año que viene a la finalización de los estudios que se están llevando a cabo. 

L. Javier Martínez-Moya Scharpf

Socio principal

Scharpf & Associates